“Ser superdotado es una ventaja si no genera problemas sociales”

Escribe sobre los niños superdotados para que se sientan identificados y para que los mayores comprendan cómo ven ellos el mundo. Dice el profesor y autor del libro Para que la sombra no sea, Luis Rodríguez Cao, que ha querido escribir esta obra con una “sensibilidad especial”.
–¿Cómo ve un niño superdotado el mundo?
–Con una especial madurez en relación a su edad, les es complicado interactuar con otros compañeros por su alta capacidad. El libro aborda el tema de la superdotación desde una perspectiva literaria, para todos los lectores, no es un manual porque, esos, normalmente, sólo los leemos los profesionales.
–¿Pueden los padres darse cuenta de la alta capacidad de sus hijos leyendo el libro?
–Pueden darse cuenta y hacer algo más, pueden sentirse identificados y averiguar los problemas que pueden surgir no sólo con el niño sino en la relación de pareja cuando las discrepancias sobre como educarlo son continuas.
–¿Qué deben hacer los padres cuando descubren que sus niños son superdotados?
–En el ámbito escolar hay que decírselo al centro para que lo verifiquen y, en la familia, hay que hacer lo que con todos los niños, darles seguridad sobre todo emocional. Hay que aprender a escucharles, mimarles y ponerles normas que no sean rígidas y funciona mucho el sentido del humor. En definitiva, ser padres.
–¿Es una ventaja o un problema ser superdotado?
–Es una ventaja siempre y cuando el hecho de ser inteligente no te genere problemas. Hay que tener un desarrollo social y emocional bueno. No se debe sacrificar el desarrollo social de una persona para que sea sólo inteligente, ni lo contrario.
–Se oye mucho eso de ‘es inteligente pero es muy vago’.
–Es muy difícil no ser vago cuando las tareas que te ponen no suponen ningún tipo de reto. Si puedes hacer algo en veinte segundos, ¿para qué le vas a dedicar una hora? El concepto de vago no está asociado a la alta capacidad, sino a la falta de reto. Los centros educativos ofrecen actividades sobre temas que ya dominan o que les resultan tan rutinarias que no implican ningún tipo de esfuerzo.
–¿Deberían compartir clase con otros niños o estar en centros especiales?
–En España están prohibidos los centros de alta capacidad.
–¿Deberían permitirse?
–Yo me hago mayor y creo que las cosas no son blancas o negras. Que haya centros de alto rendimiento me parece positivo pero no creo que deban excluir a los alumnos por su cociente intelectual, porque hay otro factor importante, que es el esfuerzo y la motivación por aprender. Un centro que no oferte retos desmotiva a los alumnos con alta capacidad.

Fuente: La opinión Coruña